Budapest es un destino en verdad relajante y agradable, gracias a sus balnearios y monumentos que se diseminan a ambos lados del Danubio y que la convierten, junto a Praga y a Viena en una de las Ciudades Imperiales de Europa. “la otra” gran capital del Imperio Austro-húngaro conserva reminiscencias de ese esplendor decadente de la época de la emperatriz Sissi y Francisco I.
Podría decirse de la capital húngara que son dos ciudades en una: Buda y Pest, separadas por el inmenso río que las une a través de los numerosos puentes de los que destacan el Erzebet y sobre todo, el majestuoso Puente de las cadenas, que conforma la imagen más tópica del lugar. En la parte de Buda todo se desenvuelve alrededor de la Ciudadela y del barrio del Castillo, con pintorescas calles de fachadas neo-barrocas y una plaza, el Bastión de los pescadores, que alberga el monumento ecuestre de Sebastián I, con ambiente animado y espectaculares vistas “al otro lado” de la ciudad. Encontramos también una iglesia gótica dedicada a San Matías muy bien conservada y que merece la pena visitar. Todo el conjunto está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
En la zona de Pest destaca el parlamento, situado a la orilla del río y de grandes proporciones (tiene una longitud de 268 m. y una cúpula de 96 m.), este edificio de estilo neogótico alberga las joyas de la coronación de Hungría, es el escenario de las reuniones de la Asamblea Nacional y entre sus casi 700 salas pueden admirarse grandes pinturas murales.
Otro lugar imprescindible es la visita a la espectacular Plaza de los Héroes, con una columna central de 36 m. de alto del conjunto al monumento al Milenario. Tras la columna se encuentran dos series de estatuas, en forma de arco, con representaciones de las mayores figuras de la historia de Hungría. La arquitectura de la plaza queda rematada por los edificios de la Galería de Arte y del Museo de Bellas Artes.
La Catedral de Santa Ana, una de las iglesias barrocas más bellas de Budapest, acoge una serie de conciertos para órgano. La basílica catedral de San Esteban también ofrece conciertos de los maestros clásicos. Otro sitio interesante es Isla Margarita, se accede a ella por el puente que lleva el mismo nombre, está declarado parque público y es una de las mejores zonas para pasear. Se pueden alquilar bicicletas para visitar la isla.
Los balnearios son un recorrido imprescindible al visitar esta ciudad. El más conocido es el del hotel Gellert, que es donde se grabó el famoso anuncio de Danone, es en el que los chicos y las chicas se bañan en una piscina. La ciudad cuenta con doce baños termales y más de cien fuentes.
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